El observatorio de Dinámica Solar de la Nasa ha brujuleado un refugio coronal en el satélite rey. Como explica el periodista Tom Yulsman en su artículo para la comedia científica ‘Discover‘, el fenómeno consiste en que el terreno magnético del Sol se abre al medio interplanetario, provocando que el material incontinente de la orla salga de suerte escopetada hacia el anterior.
En consecuencia, estas áreas tienen poco plasma sensual en imagen con su marco más resplandeciente y más sensual, hecho que todavía determina su color oscuro.
Según los antecedentes de la Nasa, estos agujeros coronales pueden restar durante semanas o hasta meses y extenderse incluso una cuarta parte de la faz del Sol.
Además, pueden retener ciertos impactos igualmente en la Tierra. Se cree que los corrientes solares que aparecen en la comarca pueden acostumbrar lluvias solares que, a su ocasión, tienen la aptitud de afectar los sistemas de mandados y llegadas de radio.